Medusa, el monstruo y la mujer

Todo es piedra...todo es piedra a mi alrrededor, piedra y rostros de horror ke duran un suspiro, cuantos sois ya incautos?, antes solia contar las estatuas de piedra ke me rodeaban ahora simplemente son como columnas ke forman parte de este lugar...malditos dioses, si los maldigo,porke ya no me pueden hacer mas mal.
Era preciosa, un ser ke todos los hombres ansiaban y ke las mujeres envidiaban, mi piel blanca como las primeras nieves, era deseada como las aguas en las cosechas, mis ojos tenian un color casi del oro, mi mirada hacia ke todos se acercaran a mi, ke me vieran como un ser casi inalcanzable, incluso mi forma de andar era diferente, como si me arrastrara de forma sutil sin hacer ruido y el espejo...el espejo me adoraba, mirando en el adornaba mis hermanos cabellos castaños, con rizos ke caian como una serpiente sobre mis hombros, parecian tener vida propia.
Ke ironia verdad?!! mis cabellos ya eran como una serpiente traviesa ke los hombres adoraban acariciar, eran la tentacion y ahora, ahora son eso...vivoras, malditas vivoras ke sisean en mis oidos sin parar, como si me recordaran lo ke fui, como si me dijeran una y otravez ke soy como ellas, ke me arrastro como ellas.
Como muchacha joven y hermosa...pensaba merecer lo mejor y alli junto a las aguas lo vi, era hermoso como si las olas y el fueran un solo cuerpo, era fuerte como el mar, bravio como sus olas cuando se mecen y peligroso...peligroso como el mar, ke cuando kiere debastar el mas grande de los navios, lo logra, pero me gustaba, me hacia sentir especial, me hacia ser casi una diosa. Sabia ke el no me amaba incluso podia intuir en su risa mentirosa ke me usaba, pero no keria creerlo, era mucho mas facil pensar ke yo era la bella mujer ke habia conkistado al señor de los mares...me conkisto de tal forma ke incluso fui capaz de vender mi vida.
Akel dia solo tenia ke negarme...solo tenia ke darle un no, era facil, sencillo casi ridiculo, pero alli estabamos los dos ardiendo como las llamas y yo como la indefensa leña, me deje kemar, me deje arrastrar por su fuego malicioso hasta caer en su juego y ser como la ceniza ke aunke no mata siempre deja su rastro. Y sin reparo, sin verguenza, nisikiera con algo de respeto, no , mi cuerpo no comprendio eso, mi cuerpo y el suyo solo se dejaron llevar por la pasion, la lujuria, las llamas, el frio marmol de akel lugar, ahora ardia por la pasion de nuestros cuerpos, akel lugar sagrado, akel lugar donde todos loaban a su diosa, fue manchado por nuestro fuego, por las cenizas de mi cuerpo y deshonrrado sin ke nos importara, hasta ke ella, en su estatua de marmol, mas blanca aun ke mi piel, grito, grito echandonos de su templo con su voz tan clara ke hacia ke la obedecieras con tan solo escucharla, en akel momento lo comprendi todo. Por un instante pense ke mi amante, el ser ke me habia llevado alli a cometer esa falta contra la diosa, daria la cara por mi, pero no...solo se rio de la diosa , y al saber ke el no podria ser castigado, la diosa descargo su rabia contra la ke se dejo transformar en leña presa del fuego, contra mi...
Mi cuerpo perfecto y admirado, se vio cubierto por escamas, mis piernas ke andaban como si me arrastrara de forma sutil, ahora eran una cola de serpiente y ahora si ke me arrastraba y no sutilmente, si no como un monstruo caminando hacia su muerte , mis cabellos, siempre llenos de vida, ahora eran todos y cada uno serpientes, serpientes biperinas, ke odiaba, ke por mucho ke me las arrancaba volvian a surgir, y siempre me hablaban, siempre...recordandome lo ke fui, pero lo peor, sin duda lo peor, fueron mis ojos, los ojos ke araian a los hombres ahora solo los atraian para obtener mi cabeza, cada vez ke mis ojos miraban a un hombre, estos se horrorizaban de tal manera ke se convertian en frias piedras, piedras ke eran mis unicas compañeras, piedras ke eran ahora los unicos hombres ke tenia a mi lado. Tras el paso de los años, me refugie en un lugar como un animal, era un animal y los hombres ya no me llamaban por mi nombre, solo era la gorgona y mis ganas de conkistarlos, se transformaron en ganas de matarlos a todos, todos pobres idiotas venian aki para vencer a la gorgona y con una sola mirada caian como piedras ke se rompian.
Ahora muchacho...vas a acabar tu conmigo? ke tienes tu de especial?, sabes ke cuando tu mirada y la mia se crucen, tu cuerpo pasara a ser tan frio como el mio y ke moriras...he de admitir ke eres listo y ke ni mi sangre...perdon mi veneno ya ke mi sangre ahora era el veneno mas mortifero, nisikiera este te afecta y ke curiosa ironia, aun siendo el ser mas horrible, el ser ke desagradaria al mas horrible de los demonios, seguia siendo soberbia y me confie, me confie hasta tal punto ke en unos instantes tu espada dejo caer mi cabeza sobre tu capa bendecida por los dioses y la gorgona, la temible medusa, solo paso a ser un arma...ya nadie nunca se acordaria de la bella mujer, del ser bello y deseado, solo se acordarian de la gorgona ke el joven perseo vencio y es mas, nadie recordara mi bello rostro ya ke solo luzco en el escudo de atenea como un trofeo, como la maldita ke ke deshonrro a la diosa. Todo en mi era belleza y ahora en mi , todo en mi era fealdad y dolor, peor por suerte pude saber ke almenos una cosa, solo una salio bien de toda esta historia horrible y oscura. Nuestra lujuria y pasion, nuestras cenizas no solo dejaron manchas negras, dejaron un ser puro y hermoso, el corcel mas bello, almenos pegaso seria recordado como el mas bello y noble corcel, aunke su madre, siempre seria recordada como el monstruo, jamas seria la bella medusa, siempre seria para la eternidad, la mas terrible de las gorgonas, la gorgona medusa...